Además de los beneficios, existen desafíos con el pastoreo de fardos.

Cuando se pastan los fardos, se pierden nutrientes y materia seca en el heno. Las fluctuaciones en el clima y las temperaturas invernales harán que el heno absorba humedad de todas direcciones. Sin una buena helada, el fondo de la paca se verá afectado por la saturación del suelo. El heno envuelto en malla o plástico causará menos pérdidas que el heno envuelto en cordeles, pero la envoltura también puede ser difícil de quitar si las condiciones se congelan.

¿Significa esto que necesitarás más heno para compensar la pérdida? Tal vez, pero si todavía hay pasto para pastar, tal vez no. Afortunadamente, el heno perdido devuelve nutrientes al suelo. También deja zonas descubiertas donde se asfixia el forraje debajo de las balas. Es posible que vuelva a crecer si se le permite reposar, o es posible que sea necesario volver a sembrarlo cuando las estaciones comiencen a cambiar nuevamente.